martes, 29 de enero de 2019

Yacimiento paleobotanico de la Rambla de Ajuez (Chovar; Castellon)




Este raro (por lo escasos que son) yacimiento de fósiles de vegetales triásicos se localiza en el municipio de Chovar (Sierra del Espadán; Castellón) y más concretamente en el Paraje del Embalse de Chovar o del Ajuez, tal como puede verse en el siguiente mapa topográfico: 

Figura nº 1: Mapa de situación del yacimiento paleobotánico (Terrasit).
En este enclave aparecen fósiles de vegetales (tallos y hojas) en bastante buen estado de conservación, pero antes de describir este yacimiento paleobotánico con detalle veremos la referencias que sobre el tema he podido encontrar. Pocas son las referencias que hay a yacimientos de fósiles de vegetales en el Triásico de la Cordillera Ibérica, el yacimiento mas conocido es el de Tabuenca-Rodanas en la Rama Aragonesa de la esta Cordillera. Se trata de una flora del Anisiense localizada en la Formación “Lutitas y Areniscas de Calcena” que sedimentológicamente corresponden a depósitos de canal fluvial. La flora esta formada por coníferas primitivas o voltziales de las especies: Voltzia heteroplylla, Voltzia walchiaeformis, Darneya peltata, Yuccites, Albertia y Willsiostrobus y pteridofitas articuladas del tipo Equisetites y Neocalamites. En la siguiente imagen (Gillet Mermet; Sciencie Photo Library) se puede un fósil de la conifera Woltzia en una arenisca:  



En el yacimiento de Maya del Baztán en el Monte Alkurrunz, en el Buntsandtein de los Pirineos Occidentales y mas concretamente en la Formación “Conglomerados, areniscas y lutitas“ del Anisiense se describe la siguiente asociación floristica: Voltzia heteriphylla, Darneya peltata y Darnella dentata, Yuccites, Albertia y Willsiostrobus y también se cita a la pteridofita Neocalamites.

En la costa norte de Mallorca, en la Punta de Son Serralta (Sierra de Tramontana) se ha descrito una flora compuesta por Equitesites mougeotii, Schizoneura paradoxa, Neuropteridium sp, Ginkgophyllum sp, Aethophyllumstipulatre, Yuccites cf vogesiacus, Willsostrobus hexasacciplhorus, Endolepis sp y  Anomopteris mougeotti

En la siguiente imagen obtenida de la publicación de J.Ruiz & M.Wachtler (2015) sobre las floras fósiles del Anisiense de Mallorca se puede ver una recreación de esta flora.

Figura nº 2: Representación artística de la flora durante el Triásico de Mallorca.
Entre la flora que aparece en la Formación Areniscas y lutitas de Estellencs del Anisiense de Mallorca, correlacionable litológica y estratigráficamente con la Formación limos y areniscas de Eslida, en la que se encuentra el yacimiento que posteriormente voy a detallar, se describen junto a abundantes coníferas, las siguientes ejemplares de sphenophytas y pteridofitas:

Equisetites mougeotii (BRONGNIART,1828) se trata de una sphenophyta de la familia de las equisetáceas que puede considerarse una cola de caballo gigante con sus tallos de 5 a 10 cm de ancho que probablemente alcanzaron una altura de 2 a 4 metros y una circunferencia del tallo de 5 cm. Los ejes longitudinales parten de un rizoma progresivo y se caracterizan por entrenudos finos que tienen distancias más largas (10 a 15 cm) en el centro y terminan en una cabeza anidada similar a un telescopio. En esta zona apical los entrenudos están muy espaciados y tienen hojas similares a pelos, que cubren el vértice. Los vástagos de los brotes se emiten desde los nodos del tallo. Cada diafragma suele estar rodeado por una vaina foliar, que consta de 2 cm de largo y 0,5 cm de ancho, como dientes en forma de espina. Las ramas laterales surgen de un eje central, que contiene los órganos fértiles, a veces más de uno agregados. En la figura de la derecha se pueden ver distintas partes de esta planta:

Anomopteris mougeotii (BRONGNIART,1828) es una pteridophyta de la familia de las Osmundaceas. En Estellencs (Mallorca) la fronda mejor conservada tiene 40 cm de largo y 10 cm de ancho. Son frondas bipinnadas con un raquis ancho pueden alcanzar una longitud de un metro, una anchura de 20 a 40 cm y se apoyaron en un raquis grueso (alrededor de 0,5 a 1,0 cm), del cual perpendicularmente forman un pinnae lineal largo y delgado (aprox. 20 cm). Un carácter distintivo es la presencia de unas hojas, llamadas aflebia, que aparecen en la base de cada fronda. Las hojas presentan las puntas pequeñas, están muy juntas pero no en contacto, que surgen perpendicularmente del tallo y varían en tamaño de 1.5 x 2 mm a 2 x 3 mm. La venación suele ser difícil de observar. Las venas secundarias surgen de un nervio central fuerte. Las hojas fértiles presentan la superficie inferior cubierta de esporangios. Las esporas son redondas de 25 a 40 µm de diámetro con una exoespora punteada. 

Anomopteris mougeotii puede considerarse como el helecho característico no solo del Triásico Temprano Medio Europeo, sino también de todo el hemisferio norte. Es un helecho común en el Buntsandstein alemán (Frentzen, 1915), y esta registrado con especímenes extraordinariamente completos de los Vosgos y otras localidades en Francia, también se ha encontrado en los Dolomitas (Wachtler 2011) y se extiende hasta el Triásico inferior de China (Wang et al., 1978). Por lo tanto, su abundancia en los estratos de Anisiense de Mallorca no es ninguna rareza. Ya en 1995 (Álvarez-Ramis et al.) se publicaron detalles de los primeros helechos mediterráneos del tipo Anomopteris  encontrados en esta zona. En su primer trabajo exhaustivo los Grauvogel (padre e hija), ampliaron la clasificación e insertaron el hábitat ecológico de esta pteridofita (Grauvogel-Stamm, L., Grauvogel, L., 1980) y también demostraron que el helecho Pecopteris sulziana que aparecía de las mismas capas era una forma juvenil de Anomopteris. El material de Estellencs, abundante en varias colecciones (Sáez Verger, Juárez Ruiz, Pedrón), permitió establecer que este helecho puede considerarse como la primera pteridofita global de un periodo geológico caracterizado por floras de helechos tremendamente pobres. 


Figura nº 3: En esta figura se puede ver un esquema de la distribución de plantas en el Pangea durante el Triásico con una zona ecuatorial donde escasean por las extremas condiciones de aridez existentes.


La presencia de este helecho en muchos yacimientos distribuidos por todo el mundo es una mas que probables indicación de que esta planta cubrió extensas áreas a la sombra de las omnipresentes coníferas. El hecho de que encuentren pequeñas hojas desecadas de este helecho es una indicación de que probablemente se adaptaba a los largos periodos de sequis que caracterizaron el clima de Permotrias. En la siguiente figura se puede ver la representación artística de una flora triásica compuesta por equisetos y helechos en una llanura aluvial parcialmente inundada (Dieter Hagmann in Schoch 2007).

Figura nº 4: Representación artística de la flora dominante (equisetos y helechos) en una llanura parcialmente inundada durante el Triásico.
No hay menciones de restos de macroflora en las Areniscas de Cañizar (salvó en su parte mas alta) que se formo en condiciones de gran aridez poco favorables para el desarrollo de la vegetación. Los primeros restos aparecen en la Formación Limos y areniscas de Eslida en la que las diferentes asociaciones florales encontradas parecen indican una disminución en la diversidad paleobotánica según se sube en la serie. 

Figura nº 5: Huella de un tronco (Eslida). 
En la Formación limos y areniscas de Eslida se  distinguen varios tipos de asociaciones de floras en función de los fósiles encontrados: La primera asociación localizada en la parte baja de la Formación comprende una macroflora de vegetación de ribera que incluye licofitas semiarborescentes como Pleuromeia, estenofitas (al menos Equisitites y quizás también Neocalamites) y coníferas hidrófilas como PelourdeaCerca del techo de esta Formación solo han sido identificados un fragmento de Pleuromeia y especímenes de Peltaspermum mal conservados y tal vez parte de un helecho. Esto es raro pues las características de sedimentación y preservación son similares a la parte inferior de la Formación, donde se ha descubierto un número mayor de especímenes. Según se deduce a partir del estudio sedimentológico esta disminución en la cantidad y diversidad de la flora podría deberse a la implantación de condiciones más áridas tipo sabkhas. 

Figura nº 6: la conifera Woltzia
En esta misma Formación también se ha descrito un conjunto de microflora formado por polen de coníferas, helechos y helechos semilleros, y contiene podocarpicolenitas, Minotosaccus, Platysaccus, Succintisporites y Cristatitriletes (BOULOUARD Y VIALLARD, 1982). 

También en la Cordillera ibérica y en posiciones estratigráficas similares, Díez et al. (1996) y Díez (2000) describieron una asociación similar del compuesta por Darneya sp., Darneya peltata, Equisetites sp., Neocalamites sp., Neocalamites cf. carrerei, Willsiostrobus sp., Willsiostrobus rhomboidalis, Pelourdea vogesiaca, Albertia sp., Voltzia sp., Voltzia heterophylla y Voltzia walchiaeformis, también del Anisiense



En la Formación Cálcena de la Rama Aragonesa de la Cordillera Ibérica y en una ubicación estratigráfica equivalente a la parte superior de la Formación Eslida han sido descritas (Díez et al., 2007) dos asociaciones de polenes y esporas que contiene principalmente coníferas y helechos (Alisporites, Chordasporites, Triadispora, Verrucosisporites y Volziaceaesporites). 

Todas estas asociaciones vegetales indican la existencia de una vegetación ribereña que comprende plantas que viven cerca de los cursos de agua (ríos o lagos permanentes) y sometidas a inundaciones periódicas. La vegetación alrededor del agua está compuesta de esfenofitas (Equisetites y Neocalamites) y coníferas higrófitas como Pourourdea. Más lejos del agua, la vegetación de las tierras bajas se caracteriza por condiciones más secas e incluye varias especies de coníferas como Voltzia, Albertia. La posible vegetación del interior con condiciones del suelo seco estacional o permanente comprende coníferas (Voltzia, Albertia, Willsiostrobus y Darneya). Esta flora pertenecería al Aniense (Triásico Medio) y también se encontraría en la Formación Limos y Areniscas de Eslida

En la siguiente imagen se puede ver una reconstrucción de las floras en un ambiente similar (facies de desbordamiento de canal):

Figura nº 7: Recreación de floras triasicas asociadas a canales y llanuras de inundación fluviales.

De acuerdo con la información obtenida de estudio de los paleosuelos que hay en esta Unidad, se observa una tendencia general a condiciones climáticas estacionales alternas, secas y ligeramente húmedas. En la parte inferior de la Formación limos y areniscas de Eslida aparecen paleosuelos pobremente desarrollados con horizontes calcáreos poco profundos lo que es indicativo de condiciones áridas. Estas condiciones evolucionaron hacia una precipitaciones anuales medias ligeramente más altas y posiblemente mejores condiciones para el crecimiento de los árboles. En la parte superior de la Formación aparecen horizontes de raíces mas densos y continuos lateralmente lo que indica una cubierta vegetativa bien desarrollada formada bajo un clima semiárido más estacional.

YACIMIENTO PALEOBOTÁNICO DEL PANTANO DEL AJUEZ (CHOVAR):

El yacimiento se encuentra en el flanco meridional del Anticlinal de la Sierra del Espadán una gran estructura directriz ibérica en cuyo núcleo afloran materiales del Pérmico Superior y Triásico Inferior abarcando del Thuringiense al Anisiense. En la siguiente figura se puede ver la situación del yacimiento en el mapa geológico del IGME:

Figura nº 8: Mapa geológico con la situación del yacimiento paleopbótanico de Chovar.
Como se puede ver en la anterior figura la flora fósil que describirá se sitúa en la Formación Limos y areniscas de Eslida por encima del contacto con la Formación Areniscas del Cañizar (antes del Garbí). En este punto la serie estratigráfica presenta un buzamiento bastante pronunciado (ver siguiente fotografía)  y esta compuesta por limolitas rojas oscuras de aspecto pizarroso y areniscas rojas con intercalaciones de arenisca blancas y amarillentas, muy micáceas, del Miembro Inferior (Arcillitas rojas con intercalaciones de arenisca) de esta Formación que se describirá detalladamente a continuación. 

Figura nº 9: Estratos de areniscas micáceas con interestratos de lutitas rojas oscuras donde se localiza la flora fósil.
Formación limos y areniscas de Eslida (López-Gómez & Arche 1988):

Esta Formación adquiere su máximo desarrollo en la zona que estamos estudiando (Chovar-Eslida) acuñándose lateralmente hasta desaparecer en zonas tan próximas como Bejis y Chelva. En la siguiente figura se puede ver la distribución geográfica de esta Formacion con indicación de sus limites  y de las direcciones de las paleocorrientes (López-Gómez et al.):

Figura nº 10: Croquis de la situación geográfica de la Formación.
La Formación esta compuesta por lutitas de color rojo y tonalidades vinosas con intercalaciones métricas de areniscas también rojizas, rosáceas o blancas generalmente muy micáceas (moscovita). Las lutitas son masivas pudiendo presentar bioturbaciones y desarrollos edáficos y las areniscas con litarenitas con cemento silíceo que se presentan en estratos de base plana y amplio desarrollo lateral con desarrollo de las estructuras de corriente: laminaciones cruzadas planas y en surco, ripples y laminación es paralela. 

En Eslida la Formación se divide en tres unidades que se muro a techo son:

 -       Unidad Inferior; compuesta por lutitas rojas de aspecto pizarroso con areniscas rojas.   

-       Unidad Intermedia; formada por dos tramos de areniscas rojizas, rosadas y blancas de grano medio en estratos métricos con laminaciones cruzadas. Los dos tramos están separados por un nivel de lutitas rojas. Estas dos unidades se corresponderían con Miembro Lutitas y areniscas de Serra de Garay.

-    Unidad Superior: formada por lutitas muy compactadas y areniscas rojas en niveles alternos de 10 a 15 metros. Los últimos 70 metros de la Unidad están formados por lutitas y limolitas rojas con finas intercalaciones de areniscas de grano muy fino .

El contacto con la Formación Areniscas del Cañizar (Areniscas del Garbí) es transicional pero neto, marcado por la repentina aparición de las lutitas. Algunos investigadores admiten la existencia de un hard ground con hierro y manganeso entre ambas formaciones lo cual parece ser cierto si observamos la disposición de las minas de asolana en la ona de Chovar-Eslida. A techo de esta Formación puede aparecer la Formación Marines (Facies Rot) o directamente las Dolomías de Landete del Muschelkalk.

Figura nº11: Contacto entre las Formaciones Eslida y Marines en esta ultima localidad. Se observa una suave pero clara discordancia angular. 
Por su parte Garay (2000) define entre las areniscas del Triásico Inferior y las dolomías del Muschelkalk una Unidad hetelolítica con predominio lutítico que denominó Formación Lutitas y areniscas de Serra que seria equivalente a las Areniscas de Rillo (Pérez-Arlucea et al 1985) a los Limos y areniscas abigarrados de Torete (Ramos 1979) en la Rama Castellana, a las Lutitas de Carcajejos y Areniscas y lutitas de Rané (Arribas 1984) en la rama Aragonesa y al Complejo lutítico-carbonatado superior (Obis et al 1973) en Villafames. 

Sin lugar a dudas el lugar donde esta mas desarrollada esta Formación es en la Sierra del Espadán y en la Sierra Calderona. Su columna tipo se ha levantado en el Plá de Les Lomes (Serra):

Figura nº 12: Columna litoestratigráfica de la Formacion lutitas y areniscas de Serra (Garay, 2000)

Garay también divide esta Unidad en tres miembros con la siguiente disposición, de muro a techo:

Figura nº 13: Mud cracks (Chovar)
Tramo de 60 a 95 metros de espesor formado por argilitas y limolitas rojas con intercalaciones de areniscas (cuarzoarenitas) de hasta 6 metros de espesor. Ocasionalmente tanto las lutitas como las areniscas presentan restos vegetales y mud cracks.

Tramo de 15 a 30 metros de areniscas rojizas con algunas intercalaciones de lutitas. Presentan granoclasificación, estratificaciones cruzadas, ripples, cantos blandos y niveles micáceos. Se trata de subarcosas con mas de un 30% de  feldespato potásico y también micas. La matriz es clorítica y el cemento de oxidos de Fe y cuarzo. Se han encontrado restos de vegetales (principalmente leñosos) determinados como equisetites. 

Figura nº 14; Paleocanal en areniscas (Formación Eslida en Marines).
Figura nº 15: Ripples  eólicos en
la Formacion Eslida en Chovar.
Tramo de argilitas rojas con algunas intercalaciones areniscosas delgadas en la base. Su espesor es de 30 metros. Las areniscas son litoarenitas con cuarzo y micas, cemento de hematites y matriz clorítica. (Miembro Porta Coeli de Garay, 2000).

La sedimentación se realizo en un medio fluvial con cánales entrelazados (tipo braided) que surcaban amplias llanuras de inundación en las que se producía una sedimentación de tipo lacustre con un gran desarrollo de suelos y puntualmente campos de dunas eólicas con ripples como los que se pueden ver en la figura de la derecha. La dirección de las paleocorrientes es hacia el SE y el Sur. 

Ambos autores (López-Gómez y Garay) dan descripciones litoestratigráficas coincidentes subdividiendo la Unidad en tres partes (miembros o tramos caracterizados porque la parte central es mucho mas areniscosa que la inferior y superior tal como se puede ver la ortofoto donde se observa que la formación tiende a formar un crestón de rocas mas resistentes con dos depresiones (rocas blandas) a ambos lados. 

Estas mismas tres unidades o tramos se pueden ver en Eslida:

Figura nº 16: Ortofoto con la Formacion limos y areniscas de Eslida en Chovar donde se puede apreciar la división de la misma en tres Unidades o Tramos. 
Garay discute las mediciones de espesores (663 metros) que de esta Formación que dan autores como López-Gómez y otros, considerando una potencia mucho menor (310 metros en el corte de Eslida) también se han medido espesores menores en localidades próximas como los 260 metros en el Alto del Rodeno y los 176 metros en el Monte Picayo. Estudiando las ortofotos de la zona me salen espesores superiores a los 300 metros (370 metros) en ambos flancos del Anticlinal del Espadán, pero nunca los mencionados 660 metros por lo que el espesor real de la Formación se acercaría mas al considerado por Garay.  

Santos-Cubedo et al (Geogaceta 2014) en su estudio sobre las icnitas de tetrápodos de Bejis describen en la Unidad lutitas y areniscas de Serra equivalente a la Formación limos y lutitas de Eslida dos tipos de facies:  una facies de areniscas rojas formada por cuerpos de areniscas canalizadas de colores rojos, rosados o blancas con base erosiva cóncava y techo plano transicional que pasa a limolitas y arcillas. La litología dominante son arcosas líticas micáceas de grano grueso a medio con estratificación cruzada cóncava o sigmoidal en tramos de 0,4 a 2 metros de potencia que pueden acumularse hasta formar cuerpos mayores de 6 a 15 metros de espesor con estratos areniscosos separados por superficies de erosión marcadas por cantos blandos o brechas. Estos cuerpos de areniscas amalgamadas presentan continuidad regional (Tramo de Areniscas de Garay). Esta facies corresponde a una sedimentación en una llanura fluvial arenosa con canales tipo braided que pueden tener un flujo alto.  

Figura nº 17 : Incita de tetrápodo y huella de un tronco en muy mal estado de conservación (Formacion Eslida en Bejis).  
La otra facies descrita en este articulo estaría formada por intercalaciones de limolitas y areniscas rojas y formada por un conjunto de capas tabulares de areniscas y limolitas rojas de poco espesor (0,10 a 0,40 mts). Las areniscas son de grano grueso a medio, micáceas, con base neta y techo transaccional y presentan granoselección decreciente siendo masivas en la base, laminadas en su parte media y con ripples y bioturbaciones a techo. En las superficies de estratificación de estas capas es donde aparecen las impresiones de macrófitos. Pueden aparecer capas de 0,30 a 0,70 metros de limolitas y argilitas cementadas por carbonatos con bioturbación por raíces y agrupaciones de nódulos de carbonatos. Estos depósitos están interrelacionados con los canales areniscosos de la facies de areniscas rojas constituyendo secuencias grano y estratodecrecientes hacia el techo y también lateralmente. Esta facies correspondería a un medio expuesto a periodos de inundación y otros de exposición subaérea en el que las areniscas se interpretan como lóbulos de derrame en un ámbito de llanura de inundación.


Figura nº 18: Reptil crurotarso y su icnita del icnogenero chiroterium. (Yacimiento de Bejis; Castellón)

DESCRIPCION DE LA FLORA DEL YACIMIENTO DE CHOVAR:

La flora objeto de este articulo aparece en un nivel de areniscas micáceas que se presentan en estratos de pequeño espesor (10–20 cm) con una laminación marcada por acumulación de micas (moscovitas), los estratos pueden ser planos tabulares y presentar estratificación cruzada en surco de poca inclinación y algún acuñamiento (ver figura nº 5). El muro del tramo fosilífero esta formado por areniscas rojas con alguna intercalación limolítica y el techo por areniscas micáceas amarillas y rojizas con estratos acuñándose rápidamente.

Figura nº 19: Situación de los fósiles (frondas y tallos) en el afloramiento, los tallos están un poco mas altos que las frondas que se sitúan en otro interestrato a escasos centímetros por debajo.

En el yacimiento del Pantano de Ajuez hay numerosos ejemplares de ramas leñosas como las que se pueden ver en la siguiente fotografía y que podrían pertenecer al genero Equisetites. Estos tallos corresponderían a arbustos de pequeño tamaño que se encuentran localizados sobre una superficie de estratificación sin ninguna orientación preferente y que seguramente correspondería a un incipiente hard ground.

Figura nº 20: Nivel de acumulación de tallos largos y estrechos y sin ninguna orientación preferente. 

Como se puede ver en la siguiente fotografía de mas detalle que las anteriores se trata de tallos con una anchura de 1 a 2 cm y una longitud de 5 a 20 cm con una estructura caracterizada por marcas transversales al eje longitudinal del vegetal que se puede presentar finamente estriado.

Figura nº 21: Fotografía de detalle de los tallos fosilizados con las marcas transversales al eje longitudinal muy visibles.

En esta otra fotografía se puede apreciar como algunos de los tallos conservan algo de su corteza que presenta estriada longitudinalmente:

Figura nº 22: Ejemplar de tallo conservando la marca de su corteza estriada longitudinalmente.
Como hemos visto en la fotografía de la figura nº 15 también aparecen unas pocas frondas conservadas como impresiones en óxidos de Fe. Estas frondas y a falta de una investigación mas a fondo, podrían pertenecer a la pteridofita Anomopteris mougeotii BRONGNIART una planta muy característica del Anisiense y que como hemos visto anteriormente se ha descrito en otros puntos de la Cordillera Ibérica:
Figura nº 23: Frondas de pteridofitas (?) en una superficie de areniscas micáceas. Se puede ver la presencia de otro estrato superior con más fósiles vegetales (frondas).

Observando estas frondas con más detalle se ve que por su forma recuerdan a los actuales helechos ya como se puede ver en las fotografías de las siguientes figuras se trata de hojas compuestas (frondas o pinnulas) con foliolos de margen liso con un nervio o raquis del que salen los foliolulos.

Figura nº 24: Detalle con escala para ver las medidas de las frondas.

Al mirar con más detalle se observa que los foliolulos presentan una estructura en lineas paralelas marcadas por tinciones de óxidos de Fe mas o menos oscuras:

Figura nº 25 Estructura interna de las hojas marcada por distintas intensidades de la coloración por óxidos de Fe.

Al observar el fósil con mayor detalle (30 aumentos) se observa que la impresión inicial se realizo en calcopirita, que posteriormente se altero y se oxido. Este hecho ya ha sido señalado por algunos investigadores sin llegar a explicar el porque de este extraño habito de fosilización:

Figura nº 23: Impresión de una hoja marcada por distintas intensidades de coloración por la presencia de óxidos de Fe procedentes de la alteración de la calcopirita en la inicialmente fosilizo el vegetal.  

Mi opinión es el vegetal fosilizo como una impresión de oxido de hierro en el plano de estratificación de la arenisca. Toda esta zona sufrío un proceso de mineralización epitermal que genero depósitos de minerales de mercurio, cobre, cobalto, manganeso, barita, cuarzo, etc... Durante este proceso el hierro que formaba la impresión inicial del fósil pudo ser sustituido por calcopirita. Finalmente y por causa de la meteorización de las rocas una vez alcanzaron la superficie, esta calcopirita se alteró formándose la actual tinción de hierro que marca al fósil. Por casualidad no toda la calcopirita se ha alterado y aun se pueden ver algunos cristales iridiscentes (partes mas oscuras) que no se llegan a distinguir en la fotografía.

En la entrada de este blog correspondiente a Enero de 2014 sobre el Bosque fosilizado de Alpuente  detallo el hallazgo, junto a abundantes troncos petrificados, de impresiones de hojas como la que se puede ver en la fotografía de la derecha. Se puede observar que hay una cierta similitud en la forma y estructura interna de estas hojas del Cretácico Inferior con las de este yacimiento triásico.

Figura nº 24: Impresión de una hoja en areniscas de la facies Weald (Cretácico Inferior) de La Yesa (Valencia). Se cede observar la similitud con las hojas de las fotografías anteriores.   

Un ejemplar de estas impresiones ha sido examinado por Don José Bienvenido, Profesor titular del Departamento de Geociencias de la Universidad de Vigo. Este investigador que ha considerado que no se trata de un fósil, opinión que respeto pero no comparto. Tanto por su situación en los mismos niveles litoestratigráficos que la paleoflora de tallos antes expuesta, como por su semejanza con floras del Buntsandtein aleman también fosilizadas en óxidos de Fe, pienso que estas impresiones deben corresponder a frondas de una flora fósil. Ademas he encontrado impresiones semejantes asociadas a una importante flora del Jurásico Superior en areniscas de la Formacion Villar del Arzobispo en Alpuente. Como se puede observar en la siguiente fotografía estas impresiones son muy semejantes a las de Chovar y también aparecen conservadas en óxidos de Fe.

Figura nº 25: Impresiones de hojas conservadas mediante tinciones de óxidos de Fe en areniscas del Jurásico Superior de Alpuente (Valencia).   
RESUMEN:

En el municipio de Chovar (Castellón) y más concretamente en el paraje del Pantano del Barranco del Ajuez se ha encontrado, y se documenta en este articulo, un yacimiento paleobotánico que se considera de gran interés debido al buen estado de conservación de una flora fosilizada hace 247 millones de años en el Anisiense (Triásico Medio) durante la sedimentación de la Formación limos y areniscas de Eslida. A falta de la confirmación por un especialista en paleobotánica pudiera tratarse de una flora típica de esta edad y compuesta por la sphenophyta equisetácea Equisetites sp y la pteridophita osmundácea Anomopteris sp.

Figura nº 24: Situación del yacimiento paleobotánico de Chovar en la secuencia litoestratigráfica del Triásico del Sector Levantino de la Cordillera Ibérica.
SUMMARY:

In the municipality of Chovar (Castellón) and more specifically in the area or de Barranco del Ajuez reservoir, a paleobotanical site has been found and documented in this article, a paleobotanic deposit which is considered of a great interest due to the good state of conservation of a fossilized flora 247 million years ago in the Anisian (Middle Triassic) during the sedimentation of de slime and sandstone Formation of Eslida. Im the absence of confirmation by a specialist in paleobotany it could be a typical flora of this age and composed of the sphenophyta equisetácea Equisetites sp and the pteridophyte osmundácea Anomopteris sp.      





lunes, 3 de diciembre de 2018

Un recorrido por el Geoparque de Molina-Alto Tajo





UN RECORRIDO POR EL GEOPARQUE DE LA COMARCA DE MOLINA DE ARAGÓN–ALTO TAJO (PROVINCIA DE GUADALAJARA).

En el año 2.000 en el Corazón de la Península Ibérica y en el de una de sus Cordilleras mas emblemáticas: la Cordillera Ibérica, se creo uno de los espacios naturales protegidos mas grande de toda España: EL PARQUE NATURAL DEL ALTO TAJODentro de este Parque Natural se sitúa el GEOPARQUE DE LA COMARCA DE MOLINA-ALTO TAJO que con sus 4300 Kmes el mas grande de España y cuyo mapa se puede ver en la siguiente figura: 


Figura nº 1: Mapa del Geoparque (Fuente: Geoparque de Molina-Alto Tajo).


Por su enorme extensión, no es posible abarcar en una sola visita por lo que esta primera vez me centre en la parte donde afloran los terrenos permotriásicos en facies Buntsandtein que en esta zona adquieren un gran desarrollo tal como se puede ver en la siguiente imagen en la que he coloreado de amarillo las zonas de mayor espesor (400-600 m) del Bunt y en rosa las de espesor comprendido entre 200 y 400 metros:

Figura nº 2: Mapa de espesores de Bunt en la Península Ibérica. En el original había un error al no considerar las importantes acumulaciones de materiales de esta edad existentes en Asturias. Si las consideramos se puede ver una clara alineación de los mayores espesores (color amarillo y rojo) alineados según una dirección NW-SE coincidiendo con la alineación Falla de Ventaniella-Serranía de Cuenca. 

La Cordillera Ibérica es una cordillera de antepaís de estructura alpina constituida por una serie de alineaciones montañosas de dirección NW-SE coincidentes con las del Rift Ibérico Mesozoico, la Cordillera tiene una longitud de 400 kilómetros que van desde la Meseta Ibérica (Burgos) hasta el Mar Mediterráneo y una anchura máxima de 200 kilómetros. 

Esta Cordillera se divide en dos sectores o ramas: la Rama Aragonesa y la Rama Castellana, además de la conocida como Unidad de Cameros. El Geoparque se localiza en la Rama Castellana de la Cordillera Ibérica, tal como se puede ver en el esquema geológico de la siguiente figura:

Figura nº 3: Croquis de la Cordillera Ibérica (Fuente: Geología de España) con indicación de la zona visitada ubicada en la Rama Castellana de esta Cordillera. 
Figura nº 4: Principales cuencas sedimentarias mesozoicas
Las rocas que se van a describir forman un ciclo completo de relleno de una cuenca intracrátonica perithética situada en la parte oriental de la Península Ibérica (la Cuenca Ibérica) y formada a lo largo de una gran sutura hercínica  (Falla de Ventaniella - Serranía de Cuenca) que actúa como limite de cuenca (Basin Boundary Fault). Esta megaestructura sufrió varias fases de compresión y extensión a lo largo de su dilatada historia geológica. Los sedimentos que rellenan esta cuenca empezaron a acumularse a comienzos del Pérmico (Autuniense) en una depresión endorreica con forma de semigraben limitada por fallas normales de dirección NW-SE y que evoluciono en el Triásico a un graben clásico, tal como se puede ver en el siguiente gráfico.

Figura nº 5: Perfil geológico de la estructura en semigraven rellena de cuñas de depósitos permotriásicos.
Figura nº 6: Bloque diagrama de un abanico aluvial.
En una primera fase (Pérmico) y hacia el Oeste (Macizo o Placa Ibérica) se produjo el levantamiento de la Cordillera Varisca generándose montañas tan imponentes como las del Himalaya que rápidamente comenzaron a erosionarse aportando gran cantidad de sedimentos detríticos gruesos (conglomerados y arenas) junto a materiales de procedencia volcánica aportados por el volcanismo asociado a las grandes fracturas hercínicas antes mencionadas. Tras estos aportes mas gruesos se depositaron materiales de granulometría mas fina (areniscas, limos, arcillas,...) y finalmente se instauro una sedimentación lacustre. Estos sedimentos componen una primera secuencia sedimentaria (Capas de la Ermita y Capas de Montesoro) que rellena un abrupto paleorelieve y son de edad Pérmico Inferior y Medio (Autuniense - Saxoniense).

Figura nº 7: Depósitos braided.
En el Thuringiense (Pérmico Superior) y tras el relleno de los principales paleorelieves variscos comienza la deposición de una segunda secuencia de relleno que comienza con el deposito de sedimentos detríticos gruesos (conglomerados y arsénicas) en un medio de abanicos aluviales y ríos de canales entrelazados que durante el Triásico Inferior y Medio (Scythiense – Anisiense) va evolucionando lateral y verticalmente a depósitos mas finos (areniscas y limos) de ríos de alta sinuosidad para culminar con depósitos de llanuras de inundación y sabkhas.



Estas secuencias detríticas de relleno de cuenca terminan, durante el Ladiniense (Muschelkalk), con una transgresión del Mar de Thetys que avanza de Este a Oeste depositando sobre toda la zona carbonatos de llanura de marea y otros tipos de depósitos marinos litorales. Posteriormente y ya durante el Triásico Superior (Karniese-Noriense), se instaura en toda la Cuenca Ibérica un medio de llanuras salinas costeras en las que se produce una sedimentación evaporítica (arcillas con yesos y sales) y sobre la que se  instaura, mediante otra transgresión, el ciclo marino jurásico.   

ESTRATIGRAFIA:

En el Geoparque se puede observar una columna litológica de cerca de 2.000 metros de espesor compuesta por sedimentos del Paleozoico Inferior (Cámbrico, Ordovícico, Silúrico y Devónico) del Paleozoico Superior (Carbonífero y Pérmico) y del Mesozoico (Triásico, Jurásico y Cretácico) además de importantes acumulaciones cenozoicas. En la siguiente imagen se puede ver la columna sintética de los terrenos Pérmicos y Triásicos (Fuente: Geoparque Molina – Alto Tajo): 


PALEOZOICO INFERIOR:

Los terrenos más antiguos vistos en el recorrido que he realizado, salvo las cuarcitas de la Cueva del Hierro, corresponden al Paleozoico Inferior, concretamente al Silúrico y son pizarras negras con intercalaciones de cuarcitas a techo. En la Hoja  del MAGNA de Checa se describe la siguiente columna de muro a techo:

Figura nº 9
De 20 a 25 metros: Pizarras negras ampelíticas, micáceas, con una abundante fauna de graptolites. Petrográficamente se trata de una filita negra esquistosa con moscovita, clorita y sericita como minerales principales y cuarzo, hierro y turmalina como accesorios. Están datadas como LLandodery Medio-Superior.

De 120 a 160 metros: Alternancia de pizarras negras y verdes, micáceas, areniscas rojizas y cuarcitas grises con estratificación  clara y fina.  

Estas pizarras se atribuyen a la Formación Bádenas (Silúrico) cuya situación estratigráfica puede verse en la figura de la derecha. En Checa (Paraje de La Tejera, PK 24,4 de la CM 211) afloran las pizarras negras esquistosas que se rompen en lajas con mucha facilidad y en las abundan sobremanera los graptolites y aquí se encuentra un yacimiento definido por el IGME como LIG IB230 y Geosite PZ005, en el que se han descrito sesenta especies de graptolites, principalmente del genero Monograptus y Spirograptus. En el yacimiento de Checa se han podido establecer 7 divisiones temporales sucesivas con una antigüedad en torno  a los 428–436 M.a dentro del Telychiense Silúrico Inferior tardío (Gutiérrez-Marco et al. 2008).

Figura nº 10: Pizarras negras del Silúrico en Checa (Guadalagara). LIG IB230.
Las rocas se presentan muy fracturadas, afectadas por grandes pliegues muy apretados de dirección N – S y un por intenso replegamiento que da lugar a pliegues chevron de pequeña escala. En la siguiente fotografía se pueden ver estas pizarras muy fracturadas y con una gran cantidad de graptolites: 

Figura nº 11: Detalle de las pizarras negras de la foto anterior donde se puede apreciar la enorme cantidad de fósiles de graptolites que contienen.

Los graptolites eran animales coloniales que vivieron entre el Cámbrico Superior y el Carbonífero Inferior. Los primeros fueron animales bentónicos que vivían anclados al fondo marino y a partir de estos surgieron los graptolites pelágicos que vivían flotando libremente en el mar, tal como se puede ver en la siguiente figura. 

Figura nº 12: Colonia de graptolites pelágicos. 

Este tipo de graptolites bentónicos se extinguieron al comienzo del Devónico y son del tipo de los que aparecen en el yacimiento de Checa y algunos de cuyos ejemplares se pueden ver en la siguiente fotografía:   

Figura nº 13: Graptolites de las pizarras silúricas de Checa: Monograptus y Spirograptus
Cada colonia esta formada por muchos individuos o zooides que vivían en celdillas o tecas agrupadas en un conjunto llamado rhabdosoma tal como se puede apreciar en la siguiente fotografía:

Figura nº 14: Ejemplar de Monograptus en el que se pueden observar el rhabdosoma y las celdillas que lo componen. La fotografía esta realizada con 30 aumentos.
Los graptolites constituyen los mas importantes fósiles guía del Ordovícico y del Silúrico gracias a que evolucionaron y se diversificaron muy rápidamente y a que son relativamente abundantes en las pizarras donde otros tipos de fósiles son raros.

Figura nº 15: Ejemplares de Spirograptus, fotografia con 30 aumentos. 

PALEOZOICO SUPERIOR: 

Las rocas descritas anteriormente forman parte del orógeno varisco que duro 100 millones de años comenzando hace 380 millones de años durante el Devónico y terminando hace 280 millones de años durante el Pérmico Medio. Este plegamiento levanto una gran cordillera que en su parte europea tiene 3.000 kilómetros de longitud y una anchura de 700 a 900 millones de años y que fue desmantelada durante el Pérmico y parte del Mesozoico.  

El Pérmico abarca el espacio temporal comprendido entre los 300 y los 200 millones de años y en Europa Occidental se divide Autuniense, Saxoniense y Thuringienseque no son nombre de pisos reconocidos en las tablas cronoestratigráficas que han sido establecidas en base a series de origen marino datadas con fósiles (foraminíferos), sino que se refieren a depósitos continentales generalmente azoicos. Estos términos están referidos a tipos de facies y pueden no abarcar los mismos espacios temporales sino que en distintos lugares presentan edades distintas. Así Holub&Kozur (1981) establecieron las correlaciones para el Pérmico en distintos lugares de Europa Occidental pudiendo observarse como en el caso de Silesia y Thuringia el Saxoniense, que esta bien estudiado, no ocupa el mismo ámbito temporal:

PISOS DEL PERMICO
DATADOS CON FOSILES
EDAD MURO
CUENCA DE SILESIA
SELVA THURINGIA
Induense (Trías Inferior)
252,17


Dorashamiense



Thuringiense




Thuringiense
Dzhulfiense

Abadhiense

Capitaniense
265,1


Saxoniense

Wordiense
268,0
Kunbergandiniense

Chinsiense

Saxoniense
Leonardiense

Artinskiense
290,1

Autuniense

Autuniense
Sakmariense
295,0
Asseliense
298,9

Como ya se ha mencionado el Pérmico Inferior de la Cordillera Ibérica se apoya discordantemente sobre el Paleozoico Inferior fosilizando un abrupto paleorelieve varisco por lo que son frecuentes e importante los cambios de facies y de espesores de las formaciones que lo componen. En la Rama Castellana de la Cordillera Ibérica  la formación basal del Pérmico son las “Capas de la Ermita” que con una irregular distribución superficial y escasa representación, presentan una gran variabilidad en sus facies aunque predominando las rocas vulcanoclásticas con conglomerados, areniscas y lutitas intercalados (facies grises) que se han interpretado como depósitos de relleno de valles encajados y abanicos aluviales proximales de clima templado y húmedo que evoluciona a un clima árido o semiárido culminando la formación con depósitos de origen lacustre. A. Ramos et al (1976) mencionan la existencia de un tramo de dolomías amarillas muy silíceas a techo de esta Formación. 

Son muy abundantes los restos vegetales (polen) de edad PérmicoInferior (Autuniense). En la cartografía geológica del IGME esta formación viene asignada al Cisuraliense (Pérmico Inferior), es decir a la época comprendida entre los 272,3 y los 289,9 m.a. que coincide con la edad datada con flora.    

Discordantemente (Discordancia Saálica?) sobre esta formación basal o directamente sobre el Paleozoico se deposita una formación de facies rojas “saxoniense” (lutitas rojas con capas de areniscas y conglomerados con aportes volcánicos), las “Capas de Montesoro”, atribuida al Pérmico por su posición estratigráfica, justo debajo de los conglomerados del Bunt. Esta Formación se depositaria en un medio sedimentario de abanicos aluviales proximales lo que condicionaría su poco espesor (50 m) e irregular distribución geográfica.

En la siguiente figura se puede ver el corte geológico realizado por A. Sopena et al (1977) en la Hoz del Gallo:
Figura nº 16: Perfil geológico en el Barranco del Río Gallo donde se observa con claridad la disposición discordante de los depósitos permotriásicos postorogénicos sobre un zocalo varisco.

Durante la visita realizada no he podido observar de cerca este tipo de depósitos, pero a la entrada del Barranco de la Hoz (Ventosa)se pueden ver como margas muy rojas dispuestas debajo de los conglomerados. En este lugar se describen 46 metros de brechas de cantos poligénicos (cuarcitas, pizarras y esquistos) con intercalaciones de limos rojizos en la base y encima limos rojizos con niveles de areniscas rojizas y brechas con nódulos dolomíticos. Estos depósitos se disponen discordantes sobre el Silúrico y son cubiertos también discordantemente por los conglomerados del Bunt y en la cartografía del IGME se asignan también al Cisuraliense.

En la siguiente figura se resumen las principales características de estas formaciones según vienen descritas en el volumen nº 6 de los Seminarios de Estratigrafía.

Figura nº 17: Perfil del Pérmico Inferior.

MESOZOICO:

Sobre este Paleozoico y en una clara discordancia angular sobre el Silúrico y en suave discordancia cartográfica sobre el Pérmico (Fase Phalzica o Palatina) se disponen depósitos siliciclásticos en facies Buntsandtein, muy bien expuestos en la localidad de Chequilla y en otras localidades visitadas: el Barranco de la Hoz y la Sierra de Armallones.

Por encima y en suave discordancia cartográfica se sitúan los conglomerados de base del Buntsandtein que marcan el comienzo de la sedimentación Triásica de tipo “germánico” con una serie siliciclástica inferior, una serie intermedia carbonatada y una superior evaporítica superior. En la Rama Castellana de la Cordillera Ibérica estos sedimentos se han agrupado en el “Grupo Guadalajara”. En toda Europa mejor observación de esta serie  se realiza en el Barranco de la Hoz, tal como describiremos mas adelante.  

En la siguiente imagen se puede ver un croquis estratigráfico con las formaciones pérmicas y triásicas con las facies dominantes (A. Ramos 1979):

Figura nº 18: Formaciones, edades geológicas y facies dominantes en el Permotrias de la Rama Castellana. 

En Chequilla y en clara discordancia angular sobre el Paleozoico Inferior, concretamente sobre las pizarras negras silúricas se sitúan los Conglomerados del Río San Pedro equivalentes a los Conglomerados de la Hoz del Gallo. Se trata de conglomerados silíceos (“pudingas”) clastosoportados, formados clastos de cuarcitas rojizas o grises claros y a veces de cuarzo, redondeados y subesféricos, medianamente clasificados por tamaños y con una matriz de areniscas rojas. En la siguiente imagen se pueden ver estos conglomerados en Chequilla, se puede apreciar una grosera imbricación de los cantos mas aplanados.       

Figura nº 19: Conglomerados siliceos ("Pudingas") con cantos cuarticos (cuarcita y cuarzo) redondeados y subesfericos y matriz de arenas rojas (Chequilla). Se aprecian marcas de contacto (presión-disolución) entre clastos.  
Figura nº 20: Pudingas con cantos imbricados.
En la siguiente fotografía se pueden ver estos mismo materiales en el Barranco de la Hoz donde la matriz arenosa es mas abundante y aparecen imbricaciones de cantos y laminaciones cruzadas en surco. 

Se trata de un conjunto de 60 a 100 metros de espesor de conglomerados en capas métricas de geometría tabular separadas por niveles con mayor cantidad de matriz arenosa o directamente por areniscas con laminaciones cruzadas. Una de las mejores exposiciones de esta formación es la de la Ermita de la Virgen de la Hoz, como se puede apreciar en la siguiente fotografía: 

Figura nº 21: La Ermita y Hospederia de la Virgen de la Hoz con sus torres de conglomerados y areniscas.
Esta Formación se depositaria en un complejo sistema de abanicos aluviales proximales coalescentes del tipo “dominados por corrientes” con los aportes procedentes de un área fuente situada al SW y controlados por fracturas NW-SE y NNE-SSW. Estos abanicos pasan lateral y verticalmente a una llanura aluvial de canales entrelazados de baja sinuosidad.

Su edad ha sido caracterizada mediante microflora como Thuringiense y en la cartografía del IGME vienen referenciado como de edad Wordiense – Induiense es decir entre el Pérmico Medio y la base del Triásico Inferior, luego en esta Formación estaría el limite Pérmico – Triásico con su extinción masiva. 

Sobre estos conglomerados y de una manera gradual pero a la vez muy clara al desaparecer bruscamente los niveles de conglomerados, se sitúan las areniscas de la Formación Areniscas de Rillo de GalloEste contacto se puede ver muy claramente en Chequilla:  

Figura nº 22: Contacto entre los Conglomerados de la Hoz del Gallo y las Areniscas de Rillo de Gallo en Chequilla.
Figura nº 22: Laminación cruzada en surco. 
La Formación esta compuesta por areniscas rojas de grano medio, en bancos de espesor muy variable (0,5 a 5 m) con base erosiva marcada por cantos de cuarcita dispersos. Las areniscas presentan una gran cantidad de estructuras sedimentarias de gran escala sobre todo estratificaciones lenticulares, laminaciones cruzadas planas y en surco junto a laminaciones  paralelas, tal como se puede ver en la fotografía de la derecha. Según estas estructuras sedimentarias las paleocorrientes dominantes son de dirección N-NW-SSE con sentido hacia el S-SE. 

Aparecen algunas pasadas de poco espesor de conglomerados silíceos y algunos niveles de areniscas de grano fino limoarcillosas. Se trata de subarcosas con cuarzo, feldespato y fragmentos de roca, con escasa matriz arcillosa y un cemento ferruginoso y/o silíceo. 

Figura nº 23: Laminaciones cruzadas y laminaciones planas en las Areniscas de Rillo de Gallo.
Su espesor varia entre 150 y 85 metros y están muy bien expuestas en Chequilla, en el Barranco de la Hoz y en la Sierra de Caldereros donde hay espectaculares exposiciones en el Castillo de Zafra:

Figura nº 24: Sets de laminaciones cruzadas en surco y sigmoidales (Castillo de Zafra).

Figura nº 25: Ripples.
Esta Formación se deposito en un medio fluvial de canales entrelazados de baja sinuosidad con gran aporte de arenas y grandes variaciones estacionales con etapas de inundación cortas. El sistema aluvial es longitudinal paralelo a las direcciones de las fracturas principales (NW-SE) y perpendicular a las direcciones de los abanicos aluviales de la anterior formación.  Su edad seria Ladiniense (Triásico Medio).

Sobre esta Formación y concordantemente se sitúa la Formación Nivel de Prados marcada por la aparición de niveles limoarenosos más blandos y muy bioturbados. La Formación esta compuesta por una alternancia de areniscas y limos de color rojo-morado. Las areniscas son arcosas de grano medio a fino  con matriz arcillosa y cemento carbonatado, ferruginoso y/o silíceo. Pueden aparecer nódulos o niveles nodulosos de carbonatos.

Figura nº 26: El Nivel de Prados en el Barranco de la Hoz.
La Formación se caracteriza por presentar una abundante bioturbación con conductos horizontales o verticales originados por fauna o por raíces. También son muy característicos los cantos blancos en los niveles areniscosos. Su espesor es de 30 metros sin grandes variaciones. Se habría formado en un medio de canales fluviales de baja sinuosidad pero mas distales que los de la formación anterior.

La mayor facilidad de erosionarse de esta Unidad permite la formación de repisas e incluso de cuevas muy utilizadas en la antigüedad, una de las cuales se puede ver en la siguiente fotografía:

Figura nº 27: Caverna excavada en los niveles blandos de Prados (Barranco de la Hoz).
El limite con la formación superior es concordante y viene marcado por la desaparición de los niveles blandos y sobre todo por la presencia de un nivel de areniscas de color blanco que originan un resalte topográfico. Su edad seria Ladiniense.

La Formación Areniscas del Rio Arandilla están compuesta por arcosas y subarcosas de grano medio dispuestas en niveles de base erosiva con estratificación cruzada de gran escala y cantos blandos y de cuarcita. En la parte superior a niveles de limos arenosos con una importante bioturbación por raíces. 

Figura nº 28: Niveles de limolitas con bioturbación por animales y raíces (Barranco de la Hoz).

Figura nº 29: Ripples de Borbullon (Imagen del IGME)
La Formación presenta una gran variación en sus espesores desde 90 a 178 metros y sus tramos inferiores se depositaron en un sistema fluvial de canales entrelazados de baja sinuosidad, pero amplios y profundos con inundaciones estacionales. Los depósitos mas abundantes son los de relleno de canal y a continuación los de barras con estratificación cruzadas en de gran escala. El sistema evoluciona a canales fluviales de alta sinuosidad con barras de meandro (point bar) en una secuencia de evolución a medios más distales. En el tramo inferior  representa la vuelta a las condiciones de canales entrelazados de baja sinuosidad. Por su posición estratigráfica tendría que ser Ladiniense.

La Formación Limos y Areniscas de Rillo se caracteriza por presentar una alternancia irregular de niveles delgados (0,10-0,60 m) de limos y areniscas de grano fino y color rojo con laminaciones cruzadas de pequeña escala. 

Figura nº 30: Chiroterium ibericum
En su parte superior aparecen restos vegetales, huellas de corriente, huellas de reptiles  del Anisiense como las de la figura de la derecha (Chiroterium ibericum), grietas de desecación y seudomorfos de cristales de sal. 

Su transito a la Unidad Superior viene marcado por un tramo de areniscas blancas o amarillas.

Su espesor varia entre 95 y 200 metros y estos materiales se depositaron en una llanura aluvial distal con pequeños canales de arenas y zonas lacustres poco desarrolladas someras.

Su edad deducida por Diez (2000) seria Anisiense-Ladiniense Inferior.

Los Limos y Areniscas abigarrados de Torete (Ramos 1979) también conocida como “facies röt”  están compuestos por arcosas verdes o amarillas de grano fino que alternan con limos en estratos de menos de 10 cm. Esta Formación se caracteriza por presentar abundantes seudomorfos de cristales de sal, sobre todo en los niveles de limos verdes. Otra característica de la formación es la existencia de niveles dolomíticos amarillos muy delgados (1 cm) y de aspecto noduloso. 

Aparecen laminaciones cruzadas a pequeña escala, bioturbación, cantos blandos, estratificación convoluta y restos vegetales. La Formación se depósito en una amplia llanura fangosa sometida a la acción de las mareas con la formación de secuencias tanto intermareales como supramareales. 

El espesor de la formación es muy variable de 15 a 40 metros y se ha datado por sus asociaciones palinológicas como Ladiniense.

Con esta formación termina el ciclo del Buntsandtein y se inicia el Muschelkalk que se dispone en “onlap” sobre anterior. Algunos investigadores describen en el techo del Bunt una importante interrupción de la sedimentación marcada por una alteración de origen edáfico con claros rastros de actividad radicular que en ocasiones llevan niveles de costras ferruginosas de diversa entidad. En la siguiente fotografía se puede ver este contacto en Chequilla y lo único que se aprecia es un contacto muy neto entre las arcillas y las dolomías. Algunos investigadores mencionan la existencia de una importante laguna estratigráfica marcada por paleosuelos y costras ferruginosas a techo de esta Formación.

Figura nº 31: Contacto entre Los Limos abigarrados de Torete y las dolomías del Muschelkalk en la carretera de Checa.

El Musckeskalk comienza con la Formación Dolomías de Tramacastilla o Capas Dolomíticas: la unidad esta constituida por dolomías cristalinas grises y amarillas en capas finas (2 a 5 cm) con laminaciones paralelas y de ripples y pueden llevar intercalado algún nivel margoso, así como algún nivel de limos rojos y verdes. Presenta espesores bastante constantes de 30 a 40 metros. De forma neta se pasa a la unidad superior y el limite suele estar marcado por un resalte topográfico tal como se puede apreciar en la siguiente fotografía. 

Figura nº 32: Las dolomías del Muschelkalk en el Mirador de La Atalaya formando un marcado escarpe topográfico.

Su edad puede ser Karniense el primer Piso del Triásico Superior) y se han interpretado como depositadas en un medio de plataforma interna o “lagoon”  protegido hay el mar por barras de calcarenitas y bordeado por la parte del continente por facies mareales.

Capas de Royuela o Dolomías, margas y calizas de Royuelaformadas por una alternancia de margas y dolomías en estratos de 0,10 a 0,30 m. Se trata de dolomías cristalinas, a veces con laminación de algas, muy bioturbadas (Rhizocorallium) y abundantes lumaquelas de gasteropodos y bivalvos. En los niveles superiores hay margas gris verdosas con Lingula tenuissima (BRONN). Su medio de sedimentación seria tranquilo, protegido, con facies de “laggoon” pero con tendencia a la somerización y a la instalación de facies de llanura mareal.

Figura nº 33: Dolomías arcillosas tableadas y margas dolomíiticas de la Formación Capas de Royuela.En estos niveles se menciona la existencia de moldes de cristales de halita.
    
La Formación presenta espesores muy constantes de aproximadamente 30 metros y se atribuye al igual que la formación anterior al Karniense en base a su contenido en microflora. 

El paso a la Unidad superior viene marcado por una disminución de los carbonatos, un cambio de color y la aparición de yesos. 

En el siguiente gráfico se puede ver de una manera resumida las unidades lito estratigráficas del Muschelkalk y sus características litológicas y ambientales: 


Keuper:

En la Hoja 489 (Molina de Aragón) viene descrita la siguiente serie:

Tramo Inferior: De 6 a 10 metros de margas y arcillas verdosas, grises y rojas con bancos de areniscas y limos.

Tramo medio: de 10 a 15 metros de arcillas pardo verdosas con yesos negros y calcarenitas dolomíticas pardas.

Tramo superior: de 70 a 100 metros formado por 20 metros de yesos rojos con cristales aciculares y margas rojas y encima arcillas rojas con yesos, jacintos y aragonitos.  

En Molina de Aragón se encuentra el LIG 118 (Yacimiento de Aragonito del Rio Gallo) localidad tipo de  esta variedad de carbonato cálcico. 

Figura nº 35: Afloramiento de margas abigarradas con evaporizas en el  LIG 118 de Molina de Aragón con la localidad-tipo del aragonito.

El Aragonito es un carbonato de formula CaCO3de colores muy variados y brillo vítreo, generalmente translucido y de raya blanca. Cristaliza en el sistema ortorrómbico en un hábito columnar, tabular o acicular, siendo su dureza es de 3,5 a 4 y frágil. En la siguiente fotografía se pueden ver varios ejemplares de cristales individuales y de maclas la mayoría de esta zona. 

Figura nº 36: Conjunto de cristales y maclas de aragonito de la localidad tipo. 

Estos terrenos se han datado como de edad Karniense-Norienseen base a su contenido palinológico y por su situación estratigráfica.

JURASICO:

Figura nº 37: La Formación Imón en Gestalgar (Valencia)
El ciclo triásico finaliza con una transgresión marina y el deposito de formaciones carbonatadas. Este transito no es brusco sino que se realiza a través de una unidad antes conocida son “suprakeuper” o “infralias” y actualmente definida como Formación Dolomías tableadas de Imón constituida por dolomías cristalinas bien estratificadas despostadas en un ambiente de plataforma submareal somera que puede evolucionan a ambientes intermareales a supramareales. Su edad seria todavía Triásico Superior (Noriense-Rhaetiense). En la zona de Molina de Aragón esta formación se ha dividido en un tramo basal de 4 m de espesor formada por calizas arcillosas amarillentas con cuarzos bipiramidados (Unidad de Transición de GOY) sobre el que reposan de 15 a 20 metros de dolomías grises bien estratificadas (tableadas).

Sobre esta Unidad y mediante un nivel margoso de 4 a 5 m de espesor se sitúa la Formación Carniolas de Cortes de Tajuña constituida por carniolas y dolomías blanquecinas.  

FORMAS DEL RELIEVE:

Figura nº 38: La Hoz del Gallo desde el Mirador.
Si algo caracteriza a los Geoparques españoles es la gran diversidad de formas geomorfológicas que presentan. En este caso las formas se diferencian de las que existen en otros geoparques (Ciudad Encantada, Torcal de Antequera,...) en que las formas están generadas en litologías detrítico-clásticas (conglomerados y areniscas principalmente) y en una serie estratigráfica predominantemente roja lo que da lugar a un paisaje muy característico, algo parecido a los de la Sierra del Espadan en Castellón. 

La forma mas famosa del Geoparque se encuentra en el termino municipal de Corduente, en el Barranco de la Hoz y se la conoce como El Huso. Se trata de una columna vertical de considerable altura que destaca en la ladera del barranco. La columna esta formada por conglomerados de la Formación Conglomerados de la Hoz del Gallo y si nos acercamos  su base confirmamos que esta formada por pudingas con algunos niveles de areniscas con cantos. En la siguiente figura se adjunta una fotografía de esta famosa estructura:


Figura nº 39: El Huso pináculo tallado en los Conglomerados de la Hoz del Gallo. 

La formación de torres talladas en areniscas por la combinación de los efectos de la estratificación horizontal y una facturación vertical abierta es muy típica por toda la zona destacando las zonas de el Barranco de La Hoz, la zona de Chequilla y la Sierra de Caldereros con el inexpugnable Castillo de Zafra situado sobre uno de estos torreones areniscosos:


Figura nº 40: Torre del Castillo de Zafra sobre un farallón de areniscas rojas

Son frecuentes la formas de erosión eólica, los conocidos “taffonis” desarrollados en cualquier niveles areniscosos de cualquiera de las formaciones pérmicas o triásicas:

Figura nº 41: Taffoni desarrollados en areniscas rojas con laminaciones cruzadas. 

En los distintos barrancos hay frecuentes ejemplos de acumulaciones de tobas que llegan a formar verdaderos “edificios”. Algunas que están asociadas a manantiales están todavía activas, otras en cambio ya no están activas al secarse las surgencias que las hicieron formarse y crecer. En la fotografía de la derecha se puede ver uno de estos "edificios" que se localiza en el cauce del Río Tajo en el termino municipal de Poveda. 

Naturalmente hay otras muchas estructuras geológicas y geomorfológicas en el Geoparque, pero es imposible referirse a todas sin extenderse demasiado.

Ademas hay muchos otros lugares a los que por falta de tiempo no he podido acceder  y que habrá que dejar para una posterior visita.





COMPARATIVA DEL PERMOTRIAS DEL GEOPARQUE DE MOLINA CON OTRAS ZONAS.

En algunas de las entradas anteriores en este blog he hablado y descrito el Pérmotrias en otros lugares de España concretamente en Valencia y en Asturias.

El Permotrias de Levante (Valencia-Castellon) es una continuación geológica de este del Geoparque de Molina con algunas diferencias sobre todo en el Pérmico Inferior que apenas existe en Levante y en el Muschelkalk y el Keuper  que están mas desarrollados. El Buntsandtein se presenta en facies similares con un mayor desarrollo de las cuarcitas (Formacion Cañizar) en Levante.  

El Permotrías de Asturias es muy similar al de la Cordillera Ibérica, así en Asturias  se definen las siguientes formaciones litoestratigráficas: Formación Sotres, Formación Cabranes, Formación Caravia y Formación Fuentes que son perfectamente correlacionables con las descritas anteriormente como se puede ver en el siguiente cuadro. Por el contrario el Muschelkalk no aparece como tal y el Keuper no presenta tanto desarrollo de las evaporitas, salvo en su parte superior, en el Tramo de Transición al Jurásico. 

En el siguiente cuadro intento realizar un boceto de las posibles correlaciones entre los depósitos permotriásicos de las tres zonas aunque habría mucho que discutir sobre este asunto. 


LA CUEVA DEL HIERRO:

En esta localidad se exploto desde muy antiguo (siglo VI a.C.) y hasta época reciente (mediados de los 70) un famoso yacimiento de hierro del que se extrajeron grandes cantidades de mineral, principalmente limolita, oligisto y siderita esta última muy apreciada en la antigüedad. 

En la fotografía de la siguiente imagen se puede ver la entrada a la mina situada en el mismo pueblo de Cueva del Hierro (Cuenca).

Figura nº 44: Entrada a la Mina de la Cueva del Hierro.
El mineral se localiza en la discordancia entre el paleozoico, concretamente las cuarcitas blancas del Ordovícico (Cuarcita Armoricana) y las dolomías del Muschelkalk (Capas Dolomíticas) tal como se puede ver en la siguiente fotografía donde la discordancia entre el las cuarcitas paleozoicas y las dolomías mesozoicas esta completamente mineralizada. Es de notar que en esta zona y debido a la presencia del Umbral de La Cueva del Hierro esta completamente ausente del Buntsandtein, que en localidades muy próximas tiene varios centenares de metros de espesor.

Figura nº 45: Galeria de la Mina con un filon de mineral de Fe en la discordancia entre el Ordovicico y el Muschelkalk. 
En las dolomías la mineralización arma en forma de bolsadas irregulares que fueron el objetivo de la minería antigua (iberos, romanos, árabes y en la Edad Media) por su facilidad de extracción, mientras que en las cuarcitas, mucho mas duras, la mineralización se presenta en vetas y filones y no fue explotada hasta la Edad Moderna cuando se generalizo el uso de explosivos y los métodos mas modernos de extracción como las vagonetas mineras, como la  que se puede ver en la siguiente fotografía en esta mina:   

Figura nº 46: Vagoneta minera en el interior de la mina de la Cueva del Hierro. Estos medios mecánicos solo se
utilizaron en épocas muy recientes. Los romanos empleaban exclusivamente el trabajo de exclavos.  
Los dos minerales mas abundantes y buscados en este yacimiento son:

Figura nº 46: Mineral de la Mina de la Cueva del Hierro
La siderita es un carbonato de hierro de formula FeCO3de color muy variable (de pardo oscuro a amarillento) de brillo vítreo. Su contenido en Fe es del 48%. Su origen puede ser hidrotermal de baja temperatura (100-300º) encontrándose en filones. 

El otro mineral abundante en este yacimiento es el oligisto que por el contrario es un óxido de hierro de formula Fe2O3que cristaliza en el sistema hexagonal y puede presentarse de diferentes formas. En la Cueva del Hierro este mineral aparece como un agregado de aspecto terroso muy poco consistente de pequeñísimos cristales rómbicos. Se color es rojo muy oscuro y presenta alteraciones a limonita en forma de concreciones.

Figura nº 47: Fotografía de la muestra de mineral de la figura anterior con 30 aumentos. De puede ver el aspecto terroso del mineral y numerosos cristales muy pequeños de oligisto y siderita.

La limonita, también muy abundante, se presenta como un producto de la alteración de los anteriores.

Los romanos explotaron la mina mediante el método de pilares y  cámaras extrayendo preferentemente la siderita que pese a su menos contenido en Fe, tiene una siderurgia mucho mas fácil que la limonita y el oligisto en parte debido a la ausencia de elementos indeseables como el fosforo y el azufre y  en parte a la presencia de elementos como el manganeso que mejoran la calidad del acero obtenido haciéndolo muy útil para la fabricación de armas y utensilios. Naturalmente esto no lo sabían los romanos, solo conocían que la siderita era mas fácil de extraer y que el hierro obtenido de este mineral era de mejor calidad que el obtenido de otras menas del Fe (limonita, oligisto, etc...) desconocían que, por la composición de la siderita, en realidad estaban obteniendo acero, mucho antes de que utilización del carbón en el proceso siderúrgico.      

Figura nº 48: Masa de mineral de hierro (oligisto y siderita) de un nivel de explotación romana.
En la Cueva del Hierro el mineral aparece en pequeños filones entrecruzados en las cuarcitas  paleozoicas y en grandes bolsadas en las dolomías triásicas y geológicamente en la terminación periclinal del Anticlinal de la Cueva del Hierrouna estructura de núcleo paleozoico (Ordovícico) y flancos mesozoicos (Muscheskalk, Jurásico,...). El Paleozoico se presenta fuertemente tectonizado, muy plegado y fracturado y a través de algunas de las fracturas se habría producido el flujo hidrotermal que aporto los fluidos mineralizantes, fluidos que al alcanzar la discordancia formaron un filón y produjeron un fuerte reemplazamiento metasomático en las dolomías dando lugar a las bolsadas de mineral que fueron beneficiadas por numerosas civilizaciones (ver fotografía nº 48). 

Figura nº 49: Filones de hierro (oligisto) en las cuarcitas ordovicicas (F. Barrios de Luna) no pudieron ser explotadas hasta épocas modernas cuando se generalizo el uso de explosivos en la minería.
Las dolomías además de la mineralización presentan un notable desarrollo de la karstificación que facilito la explotación del yacimiento desde épocas muy tempranas (siglo VI a.C. o antes en épocas prehistóricas) y destaca la presencia de una pileta kárstica que debió de surtir de agua a los mineros.

Figura nº 50: Pileta de agua formada a los pies de una cascada karstica.
El color negro es debido a la abundante presencia de manganeso.