RESUMEN:
En la anterior entrada de este blog
(Enero 2014) se describió la geología de la Cubeta Sedimentaria de Titaguas – Alpuente y la
estratigrafía del Cretácico Inferior que la rellena, incluyendo una descripción
de las principales unidades litoestratigráficas existentes y de las condiciones
sedimentarías y ambientales de su formación. En este contexto se describió un
yacimiento de árboles petrificados localizado en la Aldea de El Chopo (Alpuente) proponiendo que
muchos de los troncos allí encontrados pertenecerían al orden de las Arecales, familia Arecaceae (Palmae). Se complemento la descripción de los vegetales
superiores fosilizados con la de la fauna de “comedores de plantas” que se desarrollo en una zona con tanto
alimento disponible y concretamente el yacimiento de La
Corcolilla con sus icnitas de dinosaurio.
Pero la Cubeta de Titaguas – Aras de Alpuente es superficialmente
extensísima y geológicamente muy compleja, por lo que en la anterior entrada se
quedaron muchas cosas por describir. Por eso este post continuaremos con la
descripción geológica de la zona visitando un nuevo lugar paleontológico de
gran interés. Se trata de un yacimiento de troncos petrificados que se
localizan “in situ” y se presentan
magníficamente expuestos y a diferencia de los troncos de la Aldea del Chopo, este yacimiento presenta troncos,
posiblemente de coniferas, con las diferentes partes bien diferenciadas
(corteza, albura, duramen) y anillos de crecimiento bien visibles.
TRONCOS PETRIFICADOS:
Además del yacimiento de La Aldea de El Chopo los restos de troncos
fosilizados son muy abundantes por toda la Cubeta de Titaguas–Alpuente donde, como se
describió en el post anterior, se depositaron sedimentos con facies de llanuras
deltaicas con zonas de agua semipermanentes que podían funcionar como canales
de marea o como zonas de inundación por las que fluían canales fluviales. Este
medio sedimentario se desarrollo en un clima subtropical seco que fue
humedeciéndose progresivamente durante el Cretácico, sin presentar estaciones
marcadas, tal como parece indicar la ausencia de anillos de crecimiento en algunos
de los árboles fosilizados.
La edad de los troncos fosilizados
esta en discusión mientras que algunos investigadores asignan los terrenos de
esta zona al Jurásico Superior, concretamente a la Formación Calizas,
areniscas y arcillas de Villar del Arzobispo (Mas y Alonso, 1.983) del Titónico Superior–Berriasiense Medio, otros
los asignan al Cretácico Inferior la Formación Arenas y
arcillas del Collado (Vilas et
al. 1982) del Hauteriviense – Barremiense.
Fotografía nº 1: contacto Jurásico - Cretácico |
Aldea del Chopo serian del
Cretácico Inferior y el límite entre Jurásico y Cretácico lo situó, en esta
zona, en el contacto entre unas calizas seudonodulosas con abundantes ostreidos
y unas areniscas arcosicas con estratificaciones cruzadas, como se puede
apreciar en la fotografía nº 1 (a la izquierda).
En la siguiente figura se pueden ver
uno de los troncos petrificados que se encuentran, haciendo las veces de de
bancos, en la Plaza de La Real
Villa de Alpuente.
Como ya se menciono en la Aldea del Chopo abundan los
restos de vegetales superiores (árboles y otros restos) que se encuentran
dispersos, en zonas de acopio de los restos del despedregamiento de las
parcelas agrícolas, en el anterior post se han descrito estos fósiles y se han
adjuntado numerosas imágenes de los
mismos, a modo de recordatorio adjunto la siguiente composición fotográfica con
distintos ejemplares encontrados en la zona:
Dadas las dudas que tengo sobre si
los árboles petrificados son Araceas
(palmeras), como yo pienso, o coniferas (pinos) como los consideran en la Universidad de
Valencia, voy a colocar una fotografía con un detalle de un fósil que considero
demuestra la existencia de araceas en
el yacimiento de la Aldea
del Chopo: se trata de unas areniscas micáceas
de grano fino que conservan restos de varios tallos y la impresión de una hoja
pinnada con nervios longitudinales que muy parecida a las hojas de las actuales
palmeras o cicas.
Fotografia nº 4: Impresión de una hoja de plamera o cica (Aldea del Chopo) |
En la zona de La
Cañada Paris (Aldea
de Baldovar) he encontrado otro ejemplar de tronco fosilizado (ver
siguiente fotografía) muy parecido a alguno de los encontrados en el yacimiento
de La Aldea
del Chopo.
Fotografia nº 5: A la derecha tronco fósil de la Aldea del Chopo a la izquierda tronco de Cañada Paris |
YACIMIENTO DE TRONCOS PETRIFICADOS DE LA YESA.
En La Yesa existe
otro yacimiento de troncos petrificados diferentes de los descritos en
Alpuente, primero por su posición estratigráfica: claramente en el techo de la Facies Weald (Formación
Arenas y arcillas del Collado (Vilas et al. 1982) del Hauteriviense
– Barremiense) como por el
aspecto de los troncos muy diferente de los descritos en el post anterior.
El yacimiento se localiza en el termino municipal de La Yesa, muy cerca del límite del término municipal de Alpuente (ver figura nº 1), en el
camino que bordea el Monte de El Cabezo
(cota 1.298 msnm) en el paraje conocido como El
Cantalar. Para llegar al mismo hay que tomar el camino asfaltado de La Yesa a Ahillas y a la altura
de El Castellar tomar el Camino de El Cabezo. El yacimiento se
encuentra a la altura de las Minas de Caolín del Cabezo cuya posición se puede apreciar en la siguiente fotografía de el Monte de El Cabezo, tomada desde el Sur.
Figura nº 6: El Cerro de El Cabezo en una fotografia tomada desde su base. Las calizas que se observan en la parte alta del monte pertenecen a la Formación Mosqueruela del Cenomaniense. |
El yacimiento aflora en el
talud que ha dejado la excavación realizada para hacer el Camino de El Cabezo por el que se sube a las explotaciones mineras y se extiende longitudinalmente un par de
decenas de metros en la que aparecen varios troncos petrificados en el mismo nivel
estratigráfico, tal como se puede apreciar en la siguiente fotografía:
Fotografía nº 7: Yacimiento de troncos petrificados. |
Geológicamente, según nos indica el
mapa geológico (Hoja Nº 616 del MAGNA) de Alpuente, que se puede ver en la
siguiente figura, el yacimiento se localiza a techo de la Facies Weald es decir de la Formación Arenas y
arcillas del Collado (Vilas et al. 1982) del Hauteriviense – Barremiense, en el contacto con las margas, caliza
margosas y calizas arenosas del Aptense (Miembro
Malacara de la
Formación Calizas con Rudistas del Caroch). Encima y tal
como demuestra la existencia de muchas canteras de caolín se situaría el Albiense de la Formación Arenas de Utrillas.
Figura nº 7; Mapa geológico de la zona de El Cabezo tomado de la cartografía digital del IGME |
En la siguiente figura de puede ver
la columna litoestratigráfica del Cretácico Inferior de la Hoja de Alpuente con las
distintas formaciones litológicas que aparecen en la sección estratigráfica del
Monte de El Cabezo.
Los troncos aparecen tumbados con
distintas orientaciones aunque preferentemente con una dirección NW – SE,
aunque aparecen algunos orientados prácticamente de Este a Oeste, como se puede
ver en la siguiente fotografía. Se trata de troncos redondeados, aunque algunos
aparecen aplastados, con un grosor de 20
a 30
centímetros y sin poder llegar a ver su longitud total de
los mismos por disponerse transversalmente al camino.
Fotografía nº 8: Troncos colocados con distintas orientaciones |
Son troncos de árboles muy diferentes
de los encontrados en Alpuente (Aldea del
Chopo y Cañada Paris) pues presentan una clara estructura con anillos de
crecimiento y una corteza gruesa muy diferenciada, tal como se puede ver en las
fotografías de los diferentes ejemplares que aparecen en el yacimiento y que a
continuación describiré:
Fotografía nº 9: Tres troncos con la misma orientación. |
En la siguiente
fotografía (nº 10) se puede
ver un primer plano del primer tronco de la derecha de la fotografia nº
9, se trata de un arbol de gran tamaño, aplastado por la presión
litoestática, y en el que se puede apreciar la corteza y los anillos de
crecimiento.
En la siguiente fotografía (nº 11) se puede
ver un primer plano de un tronco que presenta un aplastamiento menor que el
anterior, también se puede observar un importante desarrollo de la corteza y
sus anillos de crecimiento. También se puede observar la diferenciación entre albura y duramen en la parte más interna del tronco.
El ejemplar de tronco fósil de la siguiente figura parece como si
tuviera una estructura anular con varias capas: corteza externa e interna
(floema), el cambium y la albura, tal como se puede ver en el esquema de la
figura nº 3. También es posible que, como ocurre en la actualidad, el árbol
sobreviviera a un incendio y generara una nueva corteza quedando la huella de
la anterior superficie cortical carbonizada.
El siguiente tronco, aunque se
encuentra en el mismo nivel estratigráfico, presenta una orientación distinta a
los descritos hasta ahora, no se observa bien porque esta manchado de barro,
pero también se aprecia una gruesa corteza y una estructura anular con la
diferenciación de la albura y el duramen.
Fotografia nº 14: Tronco de pequeño diámetro. |
El ejemplar de la siguiente fotografía (nº 14) es el que
presenta un menor tamaño de los existentes en el afloramiento y una estructura
interna un poco extraña con los anillos de crecimiento muy apretados hacia la
parte superior supongo que por efecto del aplastamiento provocado por su
enterramiento.
Todo parece indicar que los troncos cayeron
y fueron arrastrados hasta el lecho en el que aparecen depositados, entonces la
pregunta es ¿dónde estaba el bosque en el que vivían y se desarrollaban?, la
respuesta es rápida: en el mismo lugar
donde han aparecido.
Las calizas arenosas, a techo de las
cuales se localiza el horizonte estratigráfico con los troncos, se sitúan,
mediante un contacto brusco y erosivo, sobre unas arcillas abigarradas en las que he
encontrado gran cantidad de raíces fosilizadas, como se puede ver en las
siguientes fotografías, esto seria indicativo de que sobre estos sedimentos arcillososos
se desarrollaba una abundante vegetación de la que formarían parte los árboles
cuyos troncos se encuentran fosilizados.
Fotografía nº 15: Nivel de margas grises con raices |
Estratigráficamente la serie en la
que se localizan los troncos petrificados es que se puede ver en la siguiente
imagen y se describe a continuación:
En el muro y sobre un tramo de arenas
blancas de tamaño de grano medio a grueso con laminaciones horizontales
y cruzadas que ha sido objeto de investigaciones mineras mediante catas (ver fotografia nº 18 a la izquierda) pese a que geológicamente no se encuentra en la formación productiva (Facies Arenas de Utrillas) que aparece más arriba estratigráficamente, se localizan un par de metros arcillas abigarradas grises que se ven en la
fotografía anterior (nº 17).
Encima de estas arcillas abigarradas y
mediante un contacto neto y posiblemente erosivo, se depositan unas calizas
arenosas duras de color marrón claro con abundantes restos de lamelibranquios y
bioturbaciones (ver fotografía nº 19) A medio metro por encima de este contacto
con las margas abigarradas, se localiza el nivel en el que se encuentran los
troncos, que contiene algo de arcillas limoarenosas grises azuladas.
Encima del nivel de los troncos aparecen
unas calizas margoarenosas grises finamente estratificadas y calizas arenosas grises
laminadas, con abundantes restos de lamelibranquios como la que se puede ver el
la fotografía de la siguiente fotografia.
A techo de estas calizas grises fosilíferas, aparecen
calizas arenosas marrones oscuras, bioturbadas, que lateralmente pueden pasar a
calizas microconglomeráticas con clastos de cuarzo. Forman un nivel muy
continuo que se puede seguir por todo el
Monte de El Cabezo. Pertenecerían al
Miembro Malacara de la
Formación Calizas con Rudistas del Caroch y su edad seria Aptiense.
El nivel donde se encuentran los
troncos se acuña lateralmente llegando a desapacer y situandose estas calizas marrones a situarse
directamente encima de las arenas blancas.
No he podido ver lo que hay a techo
del nivel calcáreo, por estar cubierto por los derrubios de las canteras de
caolín. Pero por la presencia de estas explotaciones mineras supongo que por encima
habrá arenas caoliniferas y arcillas, como las que se pueden ver en esta fotografia que corresponde a una de las canteras del Monte de El Cabezo.
La secuencia litológica detallada en la que se localizan los troncos es la siguiente:
MURO:
+-5 metros: Banco de areniscas de color amarillento rojizo de grano grueso en estratos gruesos. El banco, que forma un resalte en la ladera de la montaña, se sitúa erosivamente sobre un nivel de margas de color gris claro y esta formado por estratos gruesos cruzados en surco con laminaciones muy marcadas horizontales y cruzadas. Aparecen set de laminaciones gruesas también cruzadas con interláminas de gravas muy finas. A techo de los bancos areniscosos pueden verse set mas delgados (10 cms) de laminaciones cruzadas sigmoidales de migración de pequeñas dunas. A techo del banco aparecen areniscas rojizas de grano muy grueso microconglomeráticas con pequeños clastos redondeados y subesféricos de cuarzo blanco y cuarcitas grises. Tanto vertical como lateralmente hay un paso a areniscas poco consolidadas de grano fino a muy fino y color blanco en estratos de 20 cm de grosor.
-0,80 mts: Arcillas abigarradas (rojizas oscuras y grises averdosadas) con nódulos silicios muy duros. Bioturbación por raíces.El nivel presenta adelgazamientos y engrosamientos laterales.
La superficie de contacto de este tramo con el nivel inferior de arcillas limosas blancas con lentejares de areniscas de grano muy fino se encuentra muy deformada por estructuras de carga alguna de las cuales debieron ser ocasionadas por pisadas de dinosaurios tal como se puede ver en la siguiente imagen:
En la siguiente fotografía se puede ver esta secuencia casi completa faltando únicamente las areniscas microconglomeráticas basales:
Así pues, la secuencia litoestratigráfica descrita corresponde con una típica secuencia transgresiva
que comienza con depósitos detritos gruesos de canal fluvial de alta energía (braided) capaz de transportar areniscas gruesas con gravas con estructuras sedimentarias tipicas de este tipo de facies fluviales. Por encima se sitúa un tramo de margas abigarradas con
restos de raíces de plantas que corresponderían a sedimentos de llanuras de
inundación vegetadas de este sistema fluvial o a zonas lacustres adyacentes al canal. La presencia de fragmentos y conchas enteras de bivalvos indicarían una progradación del mar y la formación de una playa en la que se depositaron los troncos arrastrados por el antiguo rio. En este ambiente deambulaban los animales de la época (dinosaurios) que dejaron sus huellas en el fango de las zonas palustras próximas a la playa. La parte superior de la secuencia estaría constituida por depósitos de barras litorales con laminaciones paralelas, estratificaciones cruzadas y marcas de corriente (ripples)
El paisaje se parecería mucho al de la siguiente figura en la que un sauropodo deambula por una zona costera a la que llegan troncos arrastrados por algún rio:
MURO:
Figura nº23 :Banco de areniscas con estratificaciones y laminaciones cruzadas en surco. |
-0,70 mts: Areniscas blancas, muy poco consolidadas a sueltas, de grano fino a muy fino con algunas micas y algo de caolín presentando laminaciones paralelas. A techo aparece un nivel de areniscas algo más consolidadas con cantos blandos amarillentos.
Figura nº 24: Nivel de arenas blancas de grano fino sobre las areniscas rojizas microconglomeráticas. |
Figura nº 25: Arcillas abigarradas bioturbadas por raíces. |
Figura nº 26: Moldes de bivalvos. |
-0,70 mts: Erosivamente sobre esta arcillas se sitúa un banco de areniscas grises cementadas por carbonato calcio muy duras y de pátina amarillenta. El banco se presenta en estratos irregulares de 20 centímetros de grosor que pueden presentarse cruzados en surco y con ripples. Aparecen fragmentos de conchas de bivalvos (ostreas) y moldes de lamelibranquios con ornamentación concéntrica (veneras?). También aparecen pequeños fragmentos de vegetales ferruginizados. Sobre este banco de areniscas calcáreas se localiza la superficie de acumulación de troncos con al menos 12 ejemplares dispuestos horizontalmente (tumbados) y orientados en dirección NW-SE, tal como se puede ver en la siguiente fotografia:
Figura nº 27: Superficie de acumulación de troncos de arboles. |
-0,20 mts: sobre el nivel de acumulación de troncos se sitúa una caspa irregular de margas arcillo-limosas de color gris claro con lentejones de arenas de grano fino y color banco.
Figura nº 28: Nivel de arcillas margosas blanquecinas con lentejares de areniscas. |
-2,00 mts: Areniscas calcáreas duras de patina marrón en estratos delgados (10-20 centímetros) de plano irregulares con interestratos arcillosos más gruesos hacia la base. Aparecen acuñamientos de estratos, estratificación cruzada en surco y ripples en los planos de estratificación y dentro de los estratos laminaciones paralelas. Se ven algunos niveles ferruginosos.
Figura nº 29: Tramo de areniscas calcáreas estratificadas con estratificaciones cruzadas. |
Figura nº 30: Estructura de carga en la base de un estrato areniscos. Pisada de dinosaurio?. |
Figura nº 31: Secuencia litológica completa (faltan las areniscas basales) del nivel donde se localizan los troncos de arboles. |
El paisaje se parecería mucho al de la siguiente figura en la que un sauropodo deambula por una zona costera a la que llegan troncos arrastrados por algún rio:
Figura nº 32: Paisaje del transito Jurásico - Cretácico con restos vegetales. |
Un compañero de trabajo, profesional forestal, al que pregunte si le parecía que los fósiles podrían ser coníferas, al ver las fotografías de los troncos me ha indicado que uno de los ejemplares presenta una estructura similar a la de algunos especimenes de pinos actuales que han sobrevivido a incendios forestales. El ejemplar es el de la fotografías nº 12 que vuelvo a poner resaltando la marca que podría atribuirse a la dejada por un incendio.
Fotografia nº 33: Ejemplar con una marca asimilable a dejada por los incendios en pinos actuales |
Debido a que los fósiles carecen de detalles anatómicos importantes es difícil establecer el genero al que pertenecen por ello hemos de tener en cuenta cual era la vegetación imperante en el Cretacico Inferior en esta zona.
Figura nº 34 : Abundancia de los distintos tacones durante el Cretácico y la explosión de las angiospermas. |
En el área floristica Euro-Sínica que comprendía Europa Occidental prevalece un clima árido o semiárido con una flora adaptada de Bennettitales, Cycadales y Coníferas cheirolepidiaceas.
En el Mesozoico, que es también conocido como la "Era de la Cycas", fueron muy abundantes las Bennettitales y las Cycadales que son dos grupos morfológicamente muy semejantes pero sin relación filogenética. Las Cycadales aparecieron durante el Carbonifero y se caracterizan por presentar troncos tuberosos, bajos y rechonchos, mientras que en algunos casos se parecen más a pequeñas palmeras. Las Bennettitales aparecen en el Triásico y se extienden hasta el Cretacico constituyendo durante el Jurásico el grupo de plantas mas importante por su diversidad y numero de ejemplares variando desde individuos de pequeña talla y redondeados (Cycadeoidea) a ejemplares altos y delgados. En la siguiente imagen se puede ver una representación artística de una Cycadeoidea según Markus Burkhardt:
Figura nº 35: Representación artística de una Cycadeoidea (Bennettital) en un paisaje del Cretácico Inferior. |
Figura nº 36: Espécimen de Cyca (?) |
El espécimen presenta una corteza rugosa que recuerda a la de la corteza de las cycas actuales y a la de la figura anterior. Cuando se lave y se limpie el fósil quizás se logren apreciar mas detalles de su estructura anular y de su corteza y se pueda conocer algo más y determinar si se trata de una Cycadacea o de una Bennenttital (Cycadeoidea).
Figura nº 37: Impresiones de la corteza. |
Figura nº 38: Baquisaurio alimentándose de las hojas de una araucaria (Imagen de Google). |
No obstante durante el Cretácico Inferior se establece e Europa Occidental un clima ligeramente más húmedo marcado por un gran desarrollo de los helechos. En las asociaciones florísticas del Cretácico Inferior (Neocomiense) los pteridofitas representaban un 30% de los especies y constituían una especie de sotobosque. Las Cycadales y las Bennettitales constituían otro 30% mientras que las coníferas representaban un 20% de las especies registradas. La flora seria como la que actualmente se desarrolla al Sur de Florida con una gran extension de las zonas pantanosas poco profundas y zonas ligeramente mas elevadas con mas diversidad florística.
En el Cretácico Inferior de la Cuenca Cantábrica se ha constatado (Eduardo Barrón et al, 2001) la existencia de bosques de coníferas (Araucariaceae, Cupressaceae,...) con sotobosque de criptogramas vasculares (Lycopodios, Helechos, Cycadofitas y Magnoliophytas) y por otra parte formaciones xeromorficas integradas por coníferas de la familia Cherolepidiciae, Cycadofitas y helechos.
CONCLUSIONES:
El yacimiento de arboles petrificados de La Yesa es uno de los más completos y bien expuestos de la Provincia de Valencia, tanto por la calidad de sus fósiles como por lo bien expuestos que se encuentran. Los árboles posiblemente serian coníferas que crecieron durante el Barremiense en un ambiente deltaico y clima subtropical en la parte superior de la Formación Arcillas y Areniscas del Collado (Facies Weald) junto a Cycadales y Bennettitales. En la siguiente imagen se puede ver una composición fotográfica con varios de los troncos del yacimiento de La Yesa:
Este yacimiento difiere del existente en el paraje de La Hoya (Aldea del Chopo; Alpuente) y descrito en este mismo blog en la entrada correspondiente al mes de Enero, en su posición estratigráfica, uno localizado a muro y el otro a techo de la Formación Arcillas y areniscas de El Collado y posiblemente en el tipo de arboles existentes; en uno coníferas y en el otro palmeras o similares.
En la figura nº 5 se puede ver un esquema litoestratigráfico del Cretácico Inferior de la Cuenca Iberica Suroccidental donde se localizaba la Cubeta sedimentaria de Titaguas - Alpuente.
Figura nº 39: Composición fotográfica en la que se pueden ver varios de los ejemplares de troncos de arboles junto a lo que posiblemente pudiera ser una cycadacea. |
Este yacimiento difiere del existente en el paraje de La Hoya (Aldea del Chopo; Alpuente) y descrito en este mismo blog en la entrada correspondiente al mes de Enero, en su posición estratigráfica, uno localizado a muro y el otro a techo de la Formación Arcillas y areniscas de El Collado y posiblemente en el tipo de arboles existentes; en uno coníferas y en el otro palmeras o similares.
En la figura nº 5 se puede ver un esquema litoestratigráfico del Cretácico Inferior de la Cuenca Iberica Suroccidental donde se localizaba la Cubeta sedimentaria de Titaguas - Alpuente.
Figura Nº 5: Esquema litoestratigrafico del Cretácico Inferior de la Cuenca Iberica Suroccidental |
CONCLUSIONS:
The deposit of petrified trees of La Yesa is one of the most complete and well exposed in the Province of Valencia, both for the quality of its fossils as so magnificently that are exposed. The trees were conifers that grew during the Barremian in a deltaic environment on top of the clays and sandstones of Collado Formation (Weald facies) . Figure nº 5 you can see a Lower Cretaceous lithostratigraphic scheme of Iberica Southwest sedimentary Basin I, where Titaguas- Alpuente bucket was located .